DIEZ ROSAS 7, El tesoro perdido Blanca Martínez Ruiz (2010) Llegan días en el que te cansas de ser el único que rema contra la corriente, de estar solo en lo que debería ser de dos. No es que te canses de ser el que apuesta todo, es que te duele que sea así, es que duele no sentir que lo que haces es recíproco. Esperas algo parecido a lo que haces, como una muestra de amor. Pero entonces, te descubres y estás solo, ella no está, y no hay señales de que mueva un solo dedo por retomar lo que en algún momento llamaron amor. La amas, y la amas con locura, pero estás herido y volver a intentarlo te da miedo, pero no miedo a volver a besarla, a tocarla, a quererla, sino miedo a tener un ‘no’ más en la lista, una respuesta negativa que te destruiría aún más. ¿Y a dónde carajos se fue el amor? ¿O acaso no hubo? Yo amé a Miluska, como nadie lo volverá hacer. ¿Ella a mi? La verdad es que no sé, nunca volvió, nunca llamó, no me buscó, no movió ni un solo pelo por retomar lo que nunca h...
Voy a contarles algunas historias, de esas que no se deberían contar. Voy a escribir lo que dicte el insomnio, lo que susurre el café y lo que inspire la luz de la Luna.