EL ESCRITOR INMORTAL

UNA TEMPORADA EN EL INFIERNO He pasado una temporada en el infierno, he contemplado tu hipócrita mirada, he navegado en el dulce veneno de tus labios, y hoy a mi lado ya no queda nada. He pasado una temporada en el infierno bajo las falsas caricias tuyas, bajo la suciedad de esos besos tuyos, bajo la inocencia de este estúpido corazón. He pasado una temporada en el infierno ensuciando mi cuerpo con tus besos, acariciando tus pechos dormidos. Y soñando sobre tus pechos. Probé el néctar divino de tu inocencia, hice turismo en tu maravilloso cuerpo, y hoy solo hago el amor con tu ausencia. Ya no encuentro tus dulces labios, ya mis brazos no encuentran calor, ya me quedo ciego sin mirarte, ya no sé para que tengo corazón. Dime, Sheccid de mi vida, ¿A dónde se fue el amor? Si a tu lado lo tuve todo y hoy solo me queda el recuerdo de...

HABITACIÓN 9, CALLE PLUTÓN Un par de estrellas pegadas en el cielo, la luna cansada de la vieja rutina y un escritor mediocre plasmando estas líneas. Un par de oídos que ignoran al despertador, la almohada, mi fiel compañera. Un mendigo que me mira con pena, un perro sarnoso que me quiere morder, una chica en minifalda que alquila su cuerpo y yo dando vueltas sin saber que hacer. Llego a las cuatro paredes que me apartan del mundo, miro el poster de once personas vestidos de crema, y a ciento ochenta grados me esperan, tendido sobre una mesa de patas cojas, unas cuantas palabras, algunos versos y una sola inspiración. Voy por el camino que nadie quisiera escoger, escribo las líneas que nadie quiere leer, pienso en la persona que de mi nada quiere saber. Y llegando a estas reflexiones sin nada más que hacer concluyo que estoy jodido y no puedo correr. PATRICIO MACEDO. DEDICATORIA: A este lugar en que me refu...